En una pequeña empresa, diseñar el producto que vamos a vender es sencillo en concepto pero complicado en medios.
Cuando el otro día hablábamos de la idea de empresa decíamos que era importante tener claro lo que íbamos a hacer, pero eso no es todo. Entrando más profundamente en la función técnica, hay que llevar esa idea hasta su mínimo, estudiar parte por parte una y otra vez nuestro producto, en esta parte es donde viene lo más complicado, también hay que evaluar la viabilidad de nuestro producto, y por consecuencia, también de nuestra empresa. No solo es tener una buena idea, también hay que ser realista y saber cuales son tus medios o posibles medios; si hay que pedir un préstamo o disponemos de dinero suficiente para empezar etc. Yo personalmente creo que lo más lógico (siempre que sea posible) es pensar en un proyecto que no requiera de inicio una gran inversión, y poder destinar parte de los beneficios a mejorar tu empresa.
Todo esto que acabo de contar, no solo está dentro de la función técnica, también entra dentro de la parte financiera, pero además es importante que funcione bien nuestra función comercial.
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